Mi familia es conocida en el corazón de la milla de Oro Vallisoletana de la Ribera del Duero. Regentaron una posada a los pies de la Nacional 122 hace ya 100 años , más adelante convirtiéndose en un lugar de parada obligatoria de encuentro de bodegueros y amantes del vino , viajeros y visitantes.
Mi formación ese ha basado en la sensibilidad artística, historia y tendencias.
Desarrolle proyectos de Enoturismo hace más de 25 años en la Ribera del Duero, que hoy son casos de éxito.